Blog

It is our purpose to generate content with social and development value, to seek to generate knowledge and active participation around issues of common interest.

Un fin común, esfuerzos compartidos.

Un fin común, esfuerzos compartidos.

Muchas veces nos preguntamos, ¿por qué cuando el sector social, el sector público, y hasta el sector privado, hacen muchos esfuerzos por resolver problemas sociales, y alcanzan a demostrar resultados positivos, los indicadores no mejoran en los diferentes niveles?

El alto grado de complejidad de los problemas sociales requiere que estos sean analizados y abordados desde una mirada sistémica para entender todos los factores, actores, e instituciones que inciden en ellos. Sin embargo, las organizaciones -que usualmente cuentan con recursos limitados- sólo logran centrarse en una de las necesidades de manera aislada, sin poder atenderla de forma integral. Una alternativa para hacerle frente a este desafío es el modelo de Impacto Colectivo.

El impacto colectivo - IC es un modelo de articulación y coordinación entre organizaciones de diferente naturaleza para hacer frente a problemas sociales complejos, donde cada una pone su conocimiento y experticia para alcanzar una meta común muy ambiciosa, que no puede lograr cada institución por sí misma.

Bajo el modelo de Impacto Colectivo un conjunto de organizaciones públicas, privadas y del tercer sector se alinean y crean un ecosistema para unir esfuerzos bajo una meta común de gran magnitud.

Veamos un ejemplo hipotético. Si planteáramos el reto de construir entre todos la respuesta a esta meta: “que el 100% de la población en edad de trabajar en Colombia cuente con las competencias pertinentes para su inclusión en el mercado laboral”. ¿Se alcanzan a imaginar todo lo que se necesita hacer para que esto suceda?

Es por esto que para lograr este gran propósito, más de un actor debe sumar sus esfuerzos, cumplir su rol y aportar su grano de arena. Para una meta como la anterior se necesita entender desde las empresas cuáles son las competencias pertinentes que deben tener las personas para desarrollar sus actividades y la visión de crecimiento de cada industria para saber cuántas personas requerirán; por su parte desde el gobierno necesitamos entender cómo se definen esas competencias, desde las instituciones educativas éstas cómo se forman; y, por otro lado, necesitamos personas/ estudiantes interesados en desarrollar esas competencias, y financiadores para coordinar todos esos esfuerzos.

Pensemos que estos actores están comprometidos y deciden sumar sus esfuerzos. Entonces, ¿cómo pueden trabajar juntos?

Todos los esfuerzos de los actores mencionados anteriormente deben ser interdependientes, lo que implica que necesitan una alta cooperación y coordinación, para que los jóvenes cuenten con las competencias que les permita vincularse al mercado laboral y permanecer en él. Para lograr articular sus esfuerzos pueden desarrollar su propio esquema de Impacto Colectivo, a través de los siguientes puntos:

  • Agenda Común: deberán definir y compartir una sola visión del problema social.
  • Medición compartida: de manera complementaria los integrantes deben tener claro como se ve el éxito para ellos y deben acordar formas para monitorear el avance y reportarlo. Además, porque las mediciones compartidas ayudan a que los esfuerzos se mantengan alineados.
  • Actividades complementarias: este es el punto en el que cada organización pone sobre la mesa su capacidad institucional, su experticia. Lo importante no es que todas asuman la totalidad de acciones hacia la meta, sino que entiendan como agregan valor al coordinar sus acciones individuales.
  • Comunicación permanente: deberán tener una comunicación constante y abierta para construir confianza. Este punto es crucial, implica desde la comprensión de las motivaciones de los esfuerzos de cada una de las organizaciones, hasta la creación de un lenguaje común que sea la base para la alianza.
  • Organización “Backbone” o de enlace: crear una organización independiente que tenga como rol principal coordinar las acciones interdependientes de los miembros. Las metas bajo este esquema son tan ambiciosas que requieren de una estructura capaz de soportarla por medio de comunicaciones, recolección de datos y reporte, y el manejo de los aspectos logísticos y administrativos.

En el artículo “Impacto Colectivo” de Stanford Social Innovation Review, se destacan ejemplos conocidos como el de Strive Partnership de Cincinnati que desde 2006 congrega líderes locales de diferentes sectores con un solo objetivo, hacer frente a la crisis de deserción que viven en el sector educativo en ese territorio. Incluso mucho antes, en 1993 ya se veían esfuerzos de impacto colectivo como el Elizabeth River Project que articula a más de 100 actores con el propósito de descontaminar el Río Elizabeth, o el Shape Up Somerville que desde 2002 reúne aliados para eliminar la obesidad en los niños de esa ciudad de Massachusetts. Estos tres casos son un claro referente de los resultados que trae el compromiso de un grupo de actores importantes de diferentes sectores en torno a una agenda común para dar la solución de un problema social específico.

Frente a los complejos problemas sociales que aquejan día a día a Colombia, este modelo de trabajo aparece como una llamada pertinente para todas las organizaciones que trabajan por aportar al desarrollo social del país. Para todos nosotros. Por eso, la reflexión a la que los invitamos hoy es que si queremos generar impactos de alta escala y sostenibles, las organizaciones sociales debemos dejar de pensar que somos los únicos “héroes” de la historia que estamos trabajando, o que somos los más innovadores y que tenemos las mejores soluciones para hacer frente a los retos sociales. Debemos mirar a nuestro alrededor y unirnos con aquellos con quienes tenemos un fin común. Ese fin común es Colombia.

"Las organizaciones sociales debemos dejar de pensar que somos los únicos “héroes” de la historia que estamos trabajando... Debemos mirar a nuestro alrededor y unirnos con aquellos con quienes tenemos un fin común."

 El impacto colectivo promete contribuir a resolver problemas sociales complejos, pero como todas las metodologías, los resultados reales dependerán de que quiénes lo lideran establezcan relaciones humanas basadas en la confianza y estén dispuestos a mantener la alianza. Este es uno de los retos de la cooperación que trataremos en el próximo artículo…   

 

Ángela Escallón

Directora Fundación Corona

 

**Esta nota se publicó originalmente en la Silla Social, el 07 de junio de 2016.

 

ab

 Únete a la conversación en Redes Sociales